24 de febrero de 2012

Casa Kobe, el legendario camino de la carne de oriente a México

Fin de año

La orgía de los sabores

Por Héctor León












Y cuando todo se reduce a una cena ardiente Casa Kobe despliega las parrillas levantando la bandera “del milenario camino de la mejor carne del mundo a México”. Originaria de Japón, carne suprema y de bello marmoleado y con sabor memorable: manjar para carnívoros en doctorado.

Leo Grebot, restaurantero y carnicero, socio de Casa Kobe, junto con Rodolfo Chicote, empezó a trabajar con esta carne hace cuatro años, al mismo tiempo que el ganadero Arturo Mateos empezaba con pies de crías del Gana en su rancho Las Luisas en el norte del país. De ahí nació una relación ganadero restaurantero para llevar la carne en canal al restaurante/carnicería.

Después de una ardua espera, hace un año se sacrificó el primer animal, y desde entonces los carnívoros amantes de estos suculentos cortes, tienen la posibilidad de apreciar esta milenaria carne y además llevarla a sus casas, pues también Casa Kobe tiene este servicio.



Artista del corte en canal

Leo Grebot maneja los cuchillos como el artista plástico los pinceles, introduce las hojas luminosas de acero y sustrae trozos finos de carne; entra a la parrilla y sazona sólo con sal la carne y con mirada meticulosa sabe cuando momento voltear y servir.

Nos comenta que son pocos los restaurantes los que venden carne Kobe en México, pues apenas hace unos cinco años que algunos restaurantes la venden en México.

 A nivel mundial se empezó a consumir este ganado, a partir del término de la segunda guerra. En Japón se le consideraba un “animal imperial”. Este ganado que llegó a Japón hace dos mil años, “vivía aislado genéticamente y con una dieta basada en granos y pastizales”, pues no era criado para consumo humano, sino para apoyar el trabajo agrícola.

 A lo largo de los siglos cambia su genética, al ser sacrificado para el consumo humano, primero del Japón, y después donado al mundo dejando  atrás un cambio de vida sostenido durante dos mil años. Cuando descubrieron esta virtud los ganaderos locales hicieron tratos con Australia y Estados Unidos, para exportar pies de cría.

Después de haberla probado en Honk Kong, El sueño de Leo Grebot fue tener la res completa para hacer los cortes clásicos e inventar nuevos, así como poner la carne a disposición de su clientela. Para Leo, esta carne rompe todas las reglas de la carne, pues cualquier pieza resulta muy suave y deliciosa al paladar.

Degustar carne milenaria, un ritual misterioso

El marmoleado de la carne  lo ofrece un laberinto de caminos de finas grasas que dibujan el corte y que al contacto de la parrilla saturan de sabor la carne magra. Al contacto con el paladar  lo carnoso prácticamente se desmorona en jugos ansiosos de placer.

Casa Kobe es exclusivo para amantes de la carne, donde la protagonista es la carne en su real magnitud, los cortes son hechos en Casa Kobe: un acontecimiento donde la relación rancho Las Luisas y Casa Kobe,  es codo a codo.

Quitar ese mito de que un corte es carísimo, sino que una parrillada cuesta doscientos pesos con tres cortes. Además hay empandas e incluso pizzas de carne Kobe, y el caldo de la misma carne realmente espectacular.

Colofón para un año de sabores

Cayó la noche de un año, y en plena vigilia psicoanalítica, el recuerdo de los sabores, tentaciones, arrumacos, coqueteos, encuentros con los platos y tenedores, con una luna llena rellena de queso, uno sabe que el mejor gozo después de comer, es alojar, como rábanos y arúgulas,  cada parte del cuerpo en la cazuela de sueños empañados.

El Dato

Casa Kobe

Av. Hidalgo No. 225. Entrada por Gómez Farías. Coyoacán

Tel: 50-19-45-24


1 comentario:

  1. pueden mandar una pieza de ganado kobe a acapulco por avion de rib eye con hueso. y cuanto me cuesta el kilo ?? saludos y gracias.

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