LA OBRA DE JORGE LUIS LLOPEZ SE PRESENTARA EN EL PALACIO DE LA ESCUELA DE MEDICINA

LA OBRA DE JORGE LUIS LLOPEZ SE PRESENTARA EN EL PALACIO DE LA ESCUELA DE MEDICINA DE LA UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO (UNAN) DEL CENTRO HISTORICO DE LA CAPITAL

Originario de la ciudad de México, llópez es un digno exponente de la abstracción lírica mexicana.

La pintura de Jorge luis llópez es una representación abstracta que evoca sentimientos y emociones puras, pasajes universales que logran transportar al espectador a un camino de reminiscencias, la conexión con el inconsciente colectivo.

De formación autodidacta, llópez ha logrado un estilo propio, como resultado una obra llena de simbolismo en la que sobresalen las texturas y la materia. Es importante destacar el fuerte sentido espiritual y emocional de la obra.

Del 21 al 28 de noviembre ¨ Pintura Pura ¨ se presentará en el Palacio de la Escuela de Medicina de la Universidad Nacional Autónoma de México, ubicado en el corazón de majestuosa Ciudad de México.

La inauguración de ¨ Pintura Pura ¨ se realizará el 21 de noviembre del 2013 a las 20:00 horas en el honorable Palacio de la Escuela de Medicina, localizado en la Plaza de Santo Domingo, este Palacio es uno de los más notables ejemplos de la arquitectura virreinal novo hispana. Este evento de carácter privado reunirá a figuras tanto de la sociedad como del arte. A partir del día 22 la exposición estará abierta al público hasta el día 28 de noviembre.

Para esta exposición el artista contará con la curaduría del famoso curador español, Javier Ferrer i Serra, quién ha preparado con la delicadeza más sublime, la presentación en el hermoso recinto.  El curador dentro de su texto nos habla de la obra: La pintura de Jorge luis llópez, desde el primer golpe de vista, me pareció tan transparente que al mismo artista le sorprendió mi perspicacia, la vì tan capaz de expresar llanto y risa, nostalgia y felicidad, amor y desamor, que supe que era pura biografía abstracta.

 

 POR JAVIER FERRER i SERRA

Hablar de pintura pura, es hablar de libertad, libertad de crear y separar la obra de arte de alguna función utilitaria.

La Pintura Pura no se deja doblegar por la realidad, emerge del espíritu del poeta, asciende vital absolutamente, trasciende las épocas, se convierte en un universo autónomo, que evita toda distracción que pueda ejercer el mundo de los objetos.

No hay nada que imitar, no hay nada que copiar, no sirve para nada, ni busca servir a nadie pero nos alimenta, se convierte en sujeto y crea vastas resonancias espirituales.

La pintura de Jorge luis llópez, desde el primer golpe de vista, me pareció tan transparente que al mismo artista le sorprendió mi perspicacia, la vi tan capaz de expresar llanto y risa, nostalgia y felicidad, amor y desamor, que supe que era pura biografía abstracta.

Es pintura lírica y cálida, no procede de rígidos análisis intelectuales, sino que se configura con un fruto que crece en el interior, como el niño crece en el seno materno.

Su filosofía es avanzar hacia un arte expresivo, emanado de la experiencia personal hacia el significado oculto de la vida, es pura vida.

El arte no obedece a estructuras que lo encorseten, no esta limitado en el plano, la composición no es rígida, no tiene contornos firmes, emerge o se hunde en la superficie, es  impresionista.

Su idioma abstracto esta surcado a veces por signos, y tiene una intensa textura cruda, espesa y descarnada, que la asemeja a veces a lavas, a desconchados o a territorios de planetas por explorar.

El color violenta en rojo la textura hasta apoderarse de ella unas veces como fuego tras las cenizas, otras una extraña amalgama de materia se adueña de la superficie en bandas que crean horizontes sesgados de azul contramar, y muchas mas la tierra se impone con su inmensidad silenciosa con matices de ocre.

Amanecen en el campo de batalla duros contrastes, polaridades extremas, el blanco monacal, la noche que atisba las primeras luces del alba, tonalidades de sangre seca, vinos tintos de toro, amarillos que resuenan agudos, todos revueltos.

La obra se hace seductora, encandila por su sutileza a veces otras por su energía sexual, se hace presente con una fuerza arrolladora, con torbellinos de pura materia, pedazos de lejanas angustias, de nuevas conquistas, en un canon perpetuo, idas y venidas.

En sus últimas creaciones adopta no obstante, una cierta maniere gestual, azarosa, propia del ¨dripping¨ restableciendo el contacto nunca perdido y palpitante inconsciente con la espontaneidad, expresando la energía, el movimiento y otras fuerzas interiores.

Recientemente la sutileza monocromática, los degradados sensibles, la partitura del blanco sobre el negro eleva intuitiva, una musicalidad cercana al minimalismo polifónico de Arvo Part.

Es la victoria del espíritu la que se impone, pintura pura, dueña segura de nuestros dolores, madre de nuestra soledad, la prueba de nuestra existencia, que busca y rebusca el camino entre el ser y el deber ser. Javier Ferrer i Serra. 

Para mayor información comunicarse con Rose Ruiz: 5526530712