Final anunciada: Federer vs. Murray
Por Héctor León
Estaba anunciada la victoria de Roger Federer para llegar a la final del Open Australiano contra Andy Murray. Sin sudar, pasó sobre el francés que nada pudo oponer a un cada día más perfecto suizo. Con Murray será diferente, tendrá que sudar y correr, pues el inglés se muestra cada día como un crucigrama: un hueso duro de roer. La final anunciada.
Para una semifinal, el resultado es abrumador, apenas tres sets 6-2, 6-3 y 62, sobre el francés; llega descansado Federer, el hombre que no suda ni se acongoja, en tanto Murray llega con un par de días de descanso, y dispuesto de dejar el alma en la cancha.
Pared vs. hierro
Federer es una pared, y va sobre todos los récords, igualó la marca de 268 semanas como No. 1, del gran Jimmy Connors, llegó a 22 finales de Gran Slam y tiene en sus manos adquirir 16 coronas en el mayor circuito.
El suizo es un perfecto conocido, nunca juega mal, sólo tropieza con raquetas inspiradas; Murray, es un frío hierro, un inglés con mucho pundonor, con 22 años, una de sus cualidades son sus rápidas piernas y que no deja punto sin correr. Todo el Reino Unido lo estará viendo, apostando a que se acabe la sequía de coronas de Gran Slam. Paciencia, dirá Murray, antes de entrar a la cancha dura en busca de la gloria.
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