San Valentín con santos pecadores en el W- F

La orgía de los sabores
San Valentín con santos pecadores en el W- F
Solteros y enamorados y juegos atrevidos con exclusivas modelos internacionales
Por Héctor León
todocultura@prodigy.net.mx

Para celebrar el día de San Valentín el innovador concepto Wing Factory (W-F) tiene preparada una fiesta singular con base en juegos atrevidos a cargo de santas pecadoras de la agencia Puff Models. Este sábado, a partir de las 22:00 horas, en Tamaulipas 136-A, en la Hipódromo Condesa, el W-F ofrecerá cervezas nacionales al dos por uno, además de su amplia carta que ofrece 60 etiquetas de cervezas.

Con apenas un año y medio de entrar al mercado cervecero este pub latino e industrial, trabaja con un concepto basado en agradar y servir al cliente al cien por ciento, con un servicio rápido y ágil, y una comida diseñada especialmente para acompañar a la complejidad de cervezas que ofertan.
El gerente Fernando Picazo, cervecero por convicción, que posee una colección personal de más de 300 cervezas con sus vasos, atiende cual sommelier cervecero al cliente haciéndole partícipe de los mil aromas y sabores de cervezas de malta, cebada y trigo, de casi todo el mundo.
Menú cervecero
Para empezar están sus exclusivas Alitas a las cinco salsas, con especias, picositas, con habanero, ahumadas y estilo Texas, a la pimienta y limón. Para acompañar una cerveza oscura dura están sus hamburguesas, de 250 gramos, a la parrilla, la clásica americana con tocino, con champiñones y aros de cebolla y la doble de todo la especial Fear Factory Extra Large, con correspondientes papas bien sazonadas.
Sus sándwiches de pechuga de pollo a la parrilla, con salsa teriyaki, piña y queso mozzarella o pechuga tierna con sus salsas exclusivas de Factory. Unas verdadera delicias de este género. Acompañadas por sus ensaladas estilo viejo oeste, estilo césar o bañadas con aderezos orientales.
Cervezas
Una carta diseñada especialmente para maridar con las verdaderas estrellas de este pub latino estilo industrial: las cervezas. Inglesas, mexicanas, belgas, holandesas, de Japón, Cuba, Irlanda, USA, Argentina y España.

Una de las que más se piden es la Sapporo, de Japón, pero fabricada en Canadá, acidita y agradable; la Duvel, mantiene un segundo lugar en el paladar nacional, así como la Stella Atrois, de Bélgica, que la prefieren mujeres, comentó Picazo, el gerente, por tener un efecto de champaña, muy espumosas.
La Flensburger Pilsener, de Alemania, es una buena recomendación, no es tan oscura, con mucho cuerpo y explosión de sabores; además de su línea de trigo, Paulaner, cervezas duras y potentes que llegan hasta los 11 grados de alcohol.
La clásicas inglesas, fuertes y pesadas, como la madura St. Peters, con sabor amargo y penetrante, negra, más que oscura, toda una experiencia cervecera, pues con una tienes; o la London Price, una malta de sabor penetrante, así como la bárbara e inconcebible ESB, una cerveza dulce y ámbar con 6 grados de alcohol.
Entre las nacionales destacan la Minerva, de Guadalajara, una cerveza que sabe a café, y la famosa Duff, de esta ciudad, creada a partir de la marca popularizada por los Simpsons, con un sabor “incógnito”, por lo que hay que probarla. Entre otras 50 etiquetas más.
Los socios
Uno de los socios, Ramón Becerra, explicó que están a punto de vender franquicias del concepto W-F “totalmente mexicano”, que se basa en la “amistad entre socios y trabajadores”, pues “el negocio de restaurante, es de los más celosos”.
El trabajo en W-F ha sido de equipo y buena parte de las ideas han venido de los propios trabajadores, de ahí el éxito en tan poco tiempo, pues han sido obsesivos con la higiene, extremada calidad y servicio y, sobre todo, con el “apapacho al cliente”.
Santos pecadores, en honor de San Valentín

Esta fiesta cristianizada del paganismo data del imperio romano cuando se realizaba la adoración al dios griego del amor, Eros y que los romanos llamaran Cupido, a quien se le pedía encontrar al enamorado por medio de regalos y ofrendas.
Así surgió San Valentín, un sacerdote cristiano que casaba parejas, de manera clandestina, de soldados que no se les permitía casarse, pues no combatían igual que los solteros. San Valentín fue ejecutado un 14 de febrero, por tal osadía.