Colombia
y México estrechan relaciones a través de la educación y la cultura
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En
un hecho sin precedentes se realizó la “Cátedra Colombia” en el Tec de
Monterrey de la Ciudad de México, iniciativa que se lleva a cabo por primera
vez en nuestro país en alianza con una institución educativa.
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La
“Cátedra Colombia” busca fortalecer los vínculos en materia educativa y
cultural, viendo en los jóvenes un puente que permita un mayor intercambio.
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El
artista plástico John Castles Gil ofreció la conferencia magistral “Marco
Ospina, pionero del arte abstracto en Colombia”.
Colombia
y México son dos naciones que comparten más que un mismo lenguaje, hoy en día
ambos países se enfocan en el desarrollo de sus sociedades a través de la
educación y la cultura. De ahí que la Embajada de Colombia en México, realizara
la “Cátedra Colombia”, una iniciativa
creada con el propósito de fortalecer las relaciones bilaterales y lograr que,
tanto jóvenes universitarios como la sociedad en su conjunto, tengan un mayor conocimiento de la realidad actual de estas
regiones.
Cabe destacar que la “Cátedra Colombia”,
es un proyecto académico que se efectúa por primera vez en México en alianza
con una institución educativa, para lo cual se suscribió un convenio con el Tec
Monterrey en abril de 2013, lo anterior
debido al interés por fomentar espacios que posibiliten la difusión de
los ámbitos histórico, político, social, económico, comercial, ambiental,
científico, tecnológico, educativo y cultural de las dos naciones.
El acto fue inaugurado por el Excelentísimo Embajador de Colombia en México, José Gabriel Ortiz Robledo, quien aseguró que
“el cuerpo diplomático de Colombia se siente muy orgulloso de compartir con
México y el mundo las experiencias culturales
colombianas, sobre todo ahora que nuestro país se centra en ser una de
las primeras naciones de Latinoamérica en luchar de manera efectiva porque la
ciudanía viva en completa paz”.
La
“Cátedra Colombia” incluyó diversas
actividades, tales como la conferencia magistral “Marco Ospina, pionero del
arte abstracto en Colombia”, impartida por el artista plástico John Castles
Gil, quien es
considerado el escultor más relevante de Colombia en las últimas décadas, al
brindar importantes aportes al arte moderno y contemporáneo de su país en la
segunda mitad del siglo XX. Su trabajo se ha distinguido por una evolución
continua y consistente.
Asimismo, se realizó una
muestra cultural que incluyó la presentación del ensamble coreográfico “Aires
de Colombia en el Bajío”, compañía que interpretó danzas tradicionales como: Joropo,
San Juanero, Mapalé, Bambuco, Currualo y
Puya. Mientras que en el rubro gastronómico, los asistentes al encuentro pudieron degustar
platillos típicos como Buñuelos, Almojábanas, Pan de yuca, entre otros.
El
programa de la “Cátedra Colombia”
fue completado con la apertura de la exposición “Propuesta Gráfica México -
Colombia. Beca Marco Ospina”. Desde su creación, la Fundación Marco Ospina Pro Arte
A.C. invita a participar a estudiantes de diseño gráfico de diferentes
universidades para incentivar el desarrollo de nuevos talentos, de igual manera
la fundación tiene como objetivo principal promover y difundir la obra del
maestro Marco Ospina, precursor del arte abstracto en Colombia.
Además de
la
proyección de “Los Viajes del viento” de Ciro Guerra, una de las cintas más representativas de la
filmografía colombiana contemporánea, misma
que en 2009 formó parte de la selección oficial del festival de cine de Cannes
para competir en la categoría "Una cierta mirada”. El largometraje narra
la historia de un juglar que se ha dedicado toda su vida a llevar cantos con su
acordeón
por toda su localidad. No obstante, a raíz de la muerte de su esposa decide
emprender un viaje para poner a prueba al destino.
José
Gabriel Ortiz Robledo, Embajador de Colombia en México
Nacido en Bogotá,
Colombia, José Gabriel Ortiz Robledo tomó posesión como Embajador en México el
31 de enero de 2011. Bachiller del Gimnasio Campestre de Bogotá, Ingeniero
Industrial de la Universidad de los Andes y Profesor de Desarrollo Económico en
la Universidad Jorge Tadeo Lozano en Bogotá. Tuvo una importante vinculación
con los medios de comunicación colombianos a lo largo de su vida y realizó una
labor periodística importante.
Sobre Marco Ospina
Pintor y muralista nacido
en Bogotá el 5 de septiembre de 1912, fallecido en 1983. Crítico de arte y
escritor, Marco Ospina Restrepo fue el primer abstraccionista colombiano.
Estudió en el Colegio de la Salle y en la Escuela de Bellas Artes de Bogotá,
entre 1927 y 1934. Desde 1937 y hasta 1944 fue profesor de dibujo, historia del
arte y técnicas de pintura en diversos colegios de Bogotá. En 1940 participó en
el Primer Salón de Artistas Colombianos, con el temple Estalagmitas de Yomasa,
primera muestra de su trabajo. A partir de 1944 y hasta 1983 fue profesor de
tiempo completo de la Facultad de Artes de la Universidad Nacional. Sus
obras enriquecen varios edificios en Bogotá, Duitama y Cali, y pertenecen a
numerosos museos nacionales y extranjeros, y a colecciones privadas alrededor
del mundo.
Sobre John Castles
John Castles es un
reconocido escultor barranquillero, con importantes aportes al arte moderno y
contemporáneo de Colombia en la segunda mitad del siglo XX. Después de sus
estudios en arquitectura en la Universidad Javeriana y a Universidad Nacional
de Colombia, Castles se ha dedicado a la escultura. Poco tiempo después de
empezar a exponer obtuvo el Premio Escultura en el XXV Salón Nacional de Artes
Visuales. Este artista cuenta con una
hoja de vida internacional y naciones notable en el mundo del arte y se ha
interesado por el legado de Marco Ospina en la pintura abstracta.
“Seducir
con la palabra por la paz de los pueblos”
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El reconocido antropólogo colombiano, Weildler Guerra Curvelo, ofreció una
conferencia magistral sobre “la retórica de los pueblos wayúu”.
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La figura del palabrero wayúu fue reconocida en
2010 como parte del Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO.
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Actualmente existen alrededor de 100 maestros
palabreros en la región de la guajira colombiana, sin riesgo a que este sistema
indígena de impartición de justica desparezca.
En Colombia la impartición de
justicia ha existido desde tiempos inmemoriales, esto gracias a la figura del
palabrero, desarrollada en la comunidad indígena wayúu (norte de Colombia),
para arreglar las disputas entre familias y pueblos que se vieron enfrentadas
tras la muerte de uno o varios de sus integrantes a causa de riñas que,
pudieron tener su origen en simples desacuerdos o riñas de cantina.
Los palabreros wayuú juegan un rol
central en las sociedades indígenas wayúu, debido a que son el eje de la administración
de la justicia; su papel consiste en resolver a través de la mediación y
negociación los conflictos entre los diferentes clanes e incluso con personas u
organizaciones no pertenecientes al pueblo.
Las resoluciones de este sistema
judicial no contemplan la punición o castigo de los agraviantes, sino la
reparación del daño hacia los afectados mediante compensaciones que van desde
el pago en efectivo hasta la repartición de ganado y collares con piedras de
gran simbolismo y valor para la comunidad.
De acuerdo con el especialista
Weildler Guerra, “los palabreros wayúu buscan llegar a la paz por medio de la
argumentación; de la seducción con las palabras, ya que su intención es
restaurar los lazos entre las personas mediante un perdón verdadero. Actualmente,
existen 100 palabreros que siguen ejerciendo y que continúan aliviando la
justicia colombiana, toda vez que muchos de los conflictos de las comunidades
no llegan a los tribunales, entonces los palabreros descongestionan de una
manera muy rápida y participativa los problemas locales”.
El antropólogo refiere que con
respecto a la justicia colombiana, la retórica de los palabreros wayúu funciona
de manera autónoma, sin embargo, hasta el momento no existe coordinación entre ambos
sistemas.
“Hoy en día, lo que quisiéramos es
que se incorporen principios indígenas al proceso de paz colombiano, porque
creemos que muchas de estas visiones de las disputas humanas que tienen los
pueblos amerindios, pueden contribuir de manera eficaz, como tecnología y
técnica, dado que el conflicto no es patológico y el sistema palabrero se basa
en la restauración, es decir, no busca la venganza sino el perdón. Mirar hacia
el mundo amerindio, sería maravilloso tanto para el proceso de paz de nuestro
país, como para el resto del planeta”.
En este sentido, hace cuatro semanas
el pueblo wayúu le dio un bastón de palabrero al presidente Juan Manuel Santos,
con la esperanza que contemple recursos wayúu en la resolución de conflictos.
En el año 2010, “la retórica de los
palabreros wayúu” fue reconocida por la UNESCO como parte del Patrimonio
Inmaterial de la Humanidad, al ser un sistema autóctono de derecho que, además
de eficaz cuenta con el reconocimiento de los gobiernos colombiano y
venezolano.
Sobre el maestro Weildler Guerra
Antropólogo. Magíster en Antropología por la Universidad de los Andes
(Bogotá, Colombia) y candidato a Doctor por la misma universidad. Premio Nacional
de Cultura 2001-2002 en el área de Antropología. Dirigió el Informe Regional de
Desarrollo Humano del Caribe auspiciado por el PNUD. Entre 1991 y 1994 fue
Secretario de Asuntos Indígenas del departamento de La Guajira (norte de
Colombia). Ocupó el cargo de Director Ejecutivo del Observatorio del Caribe
Colombiano (centro de pensamiento e investigaciones sobre desarrollo y cultura
de la región norte de Colombia). Actualmente se desempeña como gerente del
Banco de la República, Sucursal Riohacha.
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